La brisa de mi infancia

Por: Dhayanna Gonzales.

Un viaje de costumbre familiar

Cada verano, mi familia y yo decidimos tener un viaje al Sur. Nos dirigimos a la península y distrito de Paracas, antes de llegar a Ica. Como les conté hace semanas, mi familia y yo amamos ir al mar y no necesariamente vamos solo para darnos un chapuzón, sino para contemplar la belleza del paisaje del mar y todos sus beneficios.

Mar abierto, Paracas (2019)

En Paracas, hay distintos lugares en los que puedes ir y pasarla bien. La ruta es simple, tomas el transporte en el terminal terrestre en la auxiliar de la Panamericana Sur, a la altura del puente Próceres; encuentras buses y colectivos hacia Paracas, Chincha, Ica, Cañete y demás, con pasajes desde 10 soles y solo tardas en llegar aproximadamente 2 horas. 

Cuando mi familia y yo vamos a Ica, usualmente tenemos nuestro recorrido establecido, el año pasado cambiamos ello, sólo nos quedamos en Paracas.

Mi recorrido en Paracas 2019

Llegamos a Paracas a las 7 am. a desayunar y luego poder comenzar enérgicos el día. Mi familia suele comprar los tickets para los paseos, en el mismo muelle de Paracas, el cual considero uno de mis lugares favoritos en todo el distrito. Desde el muelle se desprenden diversos caminos, como la zona de pesca y embarcaciones, zona de restaurantes, zona de souveniers y la orilla del mar. Una vista completa que resume Paracas.

Mi familia y yo, ese día fuimos a las Islas Ballestas, abordamos la embarcación hacia la isla de lobos marinos, es una experiencia bella de un par de horas que queda grabada en tu memoria y teléfono o cámara. Puedes visualizar las formaciones rocosas que se construyen diversas islas, ves y sientes la brisa del rico mar, puedes ver los lobos marinos nadando cerca a ti y ver su hábitat natural y cuán libres son.

Camino a las Islas Ballestas, Paracas (2019)

Paracas es un sitio lindo y completo, lleno de alegría, adrenalina, relajación, diversión y armonía; un destino perfecto para toda la familia.

Ir a Paracas es ir a mi infancia

Es un sitio con una carga emocional muy grande para mí, mi primer viaje a los 4 años fue ahí, conservo las fotografías y me enorgullece poder ir cada año y es como volver al lugar que provocó ese sentimiento por los viajes y en especial, ese sentimiento de calma y paz que da el mar.

Mi mamá y yo en Paracas (2003)

Mira toda mi experiencia aquí: